Embalaje

¿Por qué envasamos nuestros cogollos con Miron Violettglas?

  • Miron Violettglas es un singular envase de vidrio biofotónico para productos naturales. Sus características únicas protegen los productos de los efectos nocivos de la luz, aumentan su durabilidad y mantienen y aumentan su eficacia. Por tanto, es ideal para conservar el frescor natural de nuestros cogollos de cannabis.

  • Además, estos frascos de vidrio de gran calidad pueden volver a cerrarse y reutilizarse.

  •   Sensi Weeds está colaborando con socios internacionales para desarrollar un revolucionario envase compostable a base de fibras de cáñamo ideado para envasar nuestros cogollos de forma aún más ecológica en el futuro.

El reducido porcentaje de luz violeta visible que deja pasar confiere al cristal un bonito color morado.

Gracias a la protección del vidrio, el sabor, el olor, el color, la bioenergía y las propiedades del producto se mantienen durante más tiempo. Las pruebas han revelado que los productos almacenados en envases Miron Violettglas conservan sus propiedades únicas durante un periodo más prolongado, que en algunos casos puede llegar incluso a ser de varios años. 

Protección contra la radiación nociva de la luz 

La luz solar es una de las fuentes más importantes para la vida humana en la Tierra. Es indispensable para la existencia y el desarrollo de la naturaleza, los seres humanos y los animales. Cuando los productos naturales se exponen al sol después de su maduración, el efecto positivo que el espectro de la luz solar tiene para la vida suele modificar el producto y acelera la descomposición molecular. Miron Violettglas cuenta con una característica única: un filtro para las radiaciones nocivas de la luz visible. Además, es el único tipo de vidrio que es parcialmente traslúcido para determinadas longitudes de onda (frecuencias) de la luz: el color violeta (visible), los rayos UVA y la luz infrarroja. Para ser más precisos, el vidrio Miron Violettglas permite una penetración del 25-45 % de la luz de entre 380 y 420 nanómetros (frecuencia violeta y UVA) y de aproximadamente el 60 % de la luz de entre 730 y 1050 nanómetros (frecuencia infrarroja). Al parecer, estas partes del espectro luminoso cargan de forma enérgica las moléculas orgánicas, lo cual es positivo para los productos envasados en los frascos de vidrio Miron Violettglas.